Hoy vamos a empezar con un ejercicio de madurez: ¿te acuerdas de cuando eras pequeño, o pequeña, y repetías en alto la palabra «jamón» una y otra vez hasta que al final lo que oías era «monja»? Y te hacía mucha gracia – o a mí me la hacía, simple que es uno. Había otra versión con la palabra bronca, que dejaré que cada uno interprete en su casa.
Yo, a mis 38 años y 124 capítulos después, sigo haciendo este tipo de chorradas, así que tengo mucha fe ya en que la cosa mejore. Pero en esta ocasión es por un buen motivo: detrás de esta aparente tontería, se esconden algunos aspectos fascinantes de nuestro cerebro y la relación que tenemos con aquello que captamos por nuestros sentidos. Un tema que me alucina y que, si algún día soy capaz de terminar el libro que estoy escribiendo, tendrá su propio capítulo.
Eso sí, hoy nos vamos a enfocar en uno sólo de los sentidos: en el oído, que para algo esto es un podcast. No sé cómo escuchas kaizen habitualmente. Hay quien me ha contado que le acompaño mientras hace deporte o mientras plancha, eso es bastante habitual también. Pero para el capítulo de hoy te voy a recomendar que lo hagas, si puedes, con auriculares. Porque, si todo va bien, la experiencia va a ser radicalmente diferente.
NOTAS DEL CAPÍTULO:
Capítulos relacionados
- #115 Gödel, Escher, Bach
- #86 El mapa de las culturas
- #78 La mirada del lenguaje
- #18 Sesgos Cognitivos (I): Jason en un callejón oscuro, pelotas de béisbol y prepararle la comida al gato
Libros recomendados
Personas mencionadas
Enlaces recomendados
Musica del capítulo: Johannes Brahms – Trio in A Minor, Op. 114 – IV. Allegro
Imagen del capítulo: Photo by Josep Molina Secall on Unsplash